Edición, Texto, fotografía, maquetación: Luis Enrique Salinas Pérez
lsalinas0510@gmail.com
Puerto Inca
Con la ilusión de explorar y conocer, después de un largo viaje llegamos a la provincia de Puerto Inca, la mañana con densa neblina que poco a poco se disipa, trasluciendo arboles frondozos, caobas, cedros, ficus e ishpingos acompañado del trinar de las aves y el croar de los batracios. Puerto Inca cobija hermosos paisajes, conserva secretos y tradiciones ancestrales, con el cielo azul y nubes talladas de compañía como símbolo de libertad infinita, iniciamos una aventura fascinante, lejos del trajín citadino. Partimos desde Puerto Inca, por el malecón Leguía; cruzamos el río Pachitea en lancha, para llegar al fundo ganadero “Chelsi”, inmensa finca de propiedad de Leonio Lukashevich que hace más de una década regula la biodiversidad con el proyecto de reintegración de árboles de caoba, cedro, ishpingo y moringa, en el verdor del paraje se avista a lo lejos un empedrado de ganado vacuno de raza Brahman y Brown Swiss, y muy satisfecho don Leonio nos comenta que tiene una producción de carne de primera calidad distribuidas en los mercados de Pucallpa y Lima.
Codo del Pozuzo
El día termina, pero el impetu de seguir el viaje rumbo a la capital ganadera y agrícola del departamento, El Codo del Pozuzo, distrito de crecimiento ordenado, la armonia de vivencias entre nativos cacataibos, migrantes de Panao, Chaglla, y colonos austroalemanes en una realidad. Al día siguiente, partimos de madrugada hacia el puente colgante de Chorropampa, lugar donde se ubica el Lek (grupo de gallos de las rocas), un espacio en el que se reúnen varios machos, entre las ramas bailan, saltan, mueven las alas y emiten sonidos muy particulares para impresionar a las hembras y estas deciden con quién se quedan después de un largo cortejeo. El río Chorropampa se une al rio Pozuzo, y caprichosamente se forma un codo de 145 grados cambiando la dirección, motivo por el cual los colonos austro alemanes denominaron a esta zona, El Codo del Pozuzo.
La tarde es lluviosa, húmeda, sin embargo, nuestro espíritu aventurero nos lleva a conocer el fundo Las Gemelas de Andrés Gstir, ciudadano codeño, llegó en 1975 y pertenece a la tercera generación de colonizadores austro alemanes asentados en esta parte de la selva huanuqueña y se dedica al manejo de piscigranjas de pacos, boquichicos y gamitanas, y para no perder la tradición a la crianza de vacunos de buena carne. Unos kilómetros más adelante, se ubica el fundo ganadero “La Convención”, de propiedad de don Ilmer Zevallos dedicado fundamentalmente al mejoramiento genético de ganados de las razas Brahman y Brown Swiss para carne, durante cuatro décadas se ha dedicado a la purificación de las razas mediante la inseminación artificial.
Honoria
En nuestro recorrido por la provincia de Puerto Inca llegamos al distrito de Honoria, misterioso, sagrado y acogedor. La armonía natural de la fuente hídrica termal y enorme biodiversidad geográfica hace que sea reconocida como lugar sagrado desde sus primeros ocupantes y que ha sido recuperado como nucleo habitacional por la familia y comunidad asháninca con el Maestro sheripiari experto en medicina tradicional don Juan Flores Salazar, la capacidad asháninca de convivir en distintos ecosistemas, su conocimiento de la policultura y su habilidad de interactuar en esta complejidad han permitido proteger el sitio y preservar su tradicional mantenimiento hasta hoy.
Lo inuadito del lugar es el río de aguas termales hirviendo cuyo origen se desconoce. Con propiedades curativas, brota a una temperatura de casi 98°C y producen una nube de vapor en constante renovación, el vaivén del agua que sube hasta la superficie encuentra una capa de piedra arcillosa que se ha ido tallando con el pasar de los años, formando capas labradas, oyos, canales y otras formas que los antiguos habitantes han reconocido como, la huaca, lugar sagrado. Su nombre es una mezcla del asháninca Mayantu “espíritu del monte” y del quechua yacu “espíritu del agua”. En sus 180 hectáreas de reserva natural se constituye un patrimonio cultural.
Preservar Mayantuyacu significa proteger la biodiversidad de la selva primaria, difundir una cultura médica muy antigua y explorar unas soluciones sustentables para los retos ambientales contemporáneos.
Importante, el centro focalizado en la cura, recibe exclusivamente pacientes, alumnos de medicina tradicional, investigadores y científicos. Mayantayacu ha realizado proyectos médicos y culturales difundidos exitosamente en Canadá, Italia, Suiza, Argentina y México. Mayantayacu un viaje místico, una aventura de búsqueda espiritual donde se guardan secretos para la vida gracias a la biodivercidad de sus plantas curativas y su gente.
Tournavista
Llegó la noche, caminando aún escuchamos el croar de las ranas, el chillido de insectos imperceptibles y el trinar de algunas aves nocturnas. Cenamos un buen caldo de gallina negra con su respectivo ingiri sancochado. El susurro de las aguas del río Pachitea compañía permanente de nuestros sueños. El murmullo de las aves nos despertarón, un manto de neblina cubría el bosque, agarramos las mochilas rumbo a la catarata de Llullabaños, Pachitea que en sus aguas discurren tranquilamente el sendero dibujado por el viento, árboles a mi alrededor sombreados por la neblina, dos horas en lancha, avistando familias de shanshos, aves y algunos primates del lugar.
Descendemos a tierra firme y emprendemos una caminata río arriba por la quebrada de Llullabaños; sus aguas descienden desde la zona de amortiguamiento de la reserva comunal del Sira. Entre insectos voladores y lagartos que se cruzan, en las paredes rocosas percibimos piedras de color rosado (ópalos rosas) piedra nacional del Perú. Ansiosos de llegar y ver sus vestiduras de aguas cristalinas y resplandeciente brillo, llegamos a la incomparable y apacible belleza natural, la catarata de Llullabaños, un paraíso terrenal.
De regreso a la comunidad nativa asháninka El Naranjal, disfrutamos de su exótica variedad gastronómica y artesanía, trabajos realizados a base del bombonaje, una planta que crece en la Amazonía que sirve para elaborar sombreros, carteras, escobas. Trabajo sostenible con el apoyo de las autoridades de la Municipalidad Distrital de Tournavista, quienes apuestan por el desarrollo del turismo y trabajan en la conservación y preservación de la taricaya (especie de tortuga). En Yamiria culmina nuestra hazaña, un hermoso crepúsculo de colores rojos, rosados, naranjas y amarillos, la noche intensa adornada de la luna y las estrellas que titilaban al compás del arroyo que discurre apaciblemente.
Puerto Inca con su imponente imagen de verde manto, bañada por sus ríos y cataratas, brillan refulgentes sus vastas ensenadas, mezclando flora y fauna en el tórrido crisol de mágicas y misteriosas lumbreras de quebradas, aguas termales con sus alegres gallitos de rocas festejando jubilosos en su encanto portentosa y fulgurosa llamarada.
Huánuco maravilloso volveré por tu encanto.
Colaboración: Fotografías y video, Fundo La Convención, Municipalidad de Tournavista y Sernanp.